inexistencia
el día de mi muerte pasó desapercibido... no hubo lágrimas ni drama, tan solo un par de miradas desconcertadas... siempre supe que así sería, silenciosa, llena de soledad...
un par de días después alguien recordó mi nombre y fue así como se supo, pero ni siquiera en ese instante pudo percibirse un poco de dolor...
morí semidesnuda una tarde de verano, con el corazón marchito y una sonrisa disimulada en el rostro... rogué tanto por este momento y al fin había llegado, hacía muchas lunas que mi tiempo en la tierra se había agotado pero se me decía que mi misión sería extendida...
me sabía innecesaria pero esperaba al menos un sollozo... sé que los ángeles no sentimos, al menos no de la misma manera, pero pasé tanto tiempo entre humanos que empecé a olvidar quién era...
ahora que ya no estaré, podré descansar... me mantendré en silencio y solo observaré, no sé si más delante me extrañarán pero he dejado de existir y ahora solo en sueños sabrán que sigo ahí... vuelvo a mi paz y tal vez quisiera no hacerlo porque vuelvo a sentirme vulnerable...
ya estaba escrito que no debía ser recordada, finalmente yo debía calmar la pena y motivarla no era una opción, pudo ser diferente, yo no debería ni pensarlo pero así fue... morí en soledad, mi esencia se desvaneció y aún siendo carente de alma, en el fondo me dolió...
sueños agotados...
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