sorpresa

cómo una sola llamada puede cambiar el rumbo de tus pensamientos... donde te observo y espero que cada momento sea iluminado por una sonrisa... así se ha vuelto tan frágil y sereno el rastro de mi sombra...
dejé de ser yo un momento para encontrarme con el más firme deseo de recompensa cuando pude ver que el mismo cielo se abría y daba pie a aquel grande anhelo que tantas noches me mantuvo en vela...
inocentemente permití que continuara el vaivén de las emociones siendo que ya no era tiempo para aquellos constantes desvaríos... no me dolía el cuerpo ni el corazón, sabía que era el momento preciso y no hubo siquiera necesidad de invocación o provocación...
de vez en cuando sí hay quienes perciben la fuerza y la esperanza... esta noche podré volver a dormir tranquila, podré volver a la cama serena, podré volver a confiar...
no hubo más remedio...