ermitaña
discretamente murmuraba advirtiendo el peligro que acechaba... despacio, alerta, serena... con un par de reclamos casi inaudibles, como debatiendo en su conciencia... claramente podía observarse la vaguedad en su rostro, como si estuviese sumergida en la misma inexistencia de los sueños, entregada a la ausencia de una voluntad palpable...
creyéndose invisible, sabiéndose solitaria... transpirando paz emanada en desenfreno desde el mismo punto que envolvía la perdición... totalmente cubierta de amor, observando con recelo, cuidando a la vida misma cual si fuera su entera creación, reflexionando la necesidad de entrega, sorteando desvaríos, inventando mil y un razones para seguir siendo a contraluna...
indiferente hasta los huesos, determinada en introspección, sabia con un aroma a eternidad, entregada simulando capricho, paciente más allá de la cordura... así debía ser su naturaleza cuasi perfecta, su esencia indescifrable... incongruencia inagotable...
el amor insiste y persiste...
0 Comments:
Post a Comment
<< Home