de vuelta

más de una vez pude ver que no tenía sentido... el sol se ocultaba con descaro, las alas perdían su fragilidad... no era un dia cualquiera del otro lado, el espejo estaba particularmente opaco...
la sombra pareció desprenderse, tomar vida propia... hasta ella pudo percibir que el sin sentido tenía el inevitable control sobre la paz en la tierra...
todo comenzó a marchitarse hasta que recobré el sentido, tomé fuerza desde el alma y así me encontré de pie de vuelta hacia la eternidad...
a cada paso el mundo renacía, sabía que seguía siendo una extraña pero por alguna razón la tierra empezó a reconocerme, de pronto vibró a mi ritmo... ahora era yo quien redescubría la armonía...
gracias por esa luz...